Refugiados llegando a la ciudad de Le Perthus en febrero de 1939.
Fotografía de Bates Winifred.
(Imperial War Museum, ID: HU 33169)
Fotografía de Bates Winifred.
(Imperial War Museum, ID: HU 33169)
El gobierno de París, inicialmente contrario al paso de las columnas de refugiados a territorio francés, accedió finalmente a abrir la frontera alojándolos en campos situados en las localidades de Saint-Cyprien, Argelès-sur-Mer y Barcarés, abriéndose posteriormente más campos en Agde, Gurs, Vernet, Noé, Rieucros, Vernet d´Ariege, Mazerès, Septfonds y el Fuerte de Colliure. La vida en dichos campos resultó ser muy penosa, ya que las condiciones de alojamiento, alimentación e higiene fueron deficientes en extremo, lo que condujo a un empeoramiento general de las condiciones de salud de los internados, llegándose a experimentar un gran número de muertes entre los más débiles (niños, enfermos y heridos, ancianos...).
Reportaje Camp d’Argelers (TVC)
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Fotografías del Campo d’Argelès realizadas por Robert Capa (Marzo de 1939)
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Fotografías del Campo d’Argelès realizadas por Robert Capa (Marzo de 1939)
Con la declaración de guerra de Francia a Alemania tras la invasión de Polonia en septiembre de 1939 a los refugiados españoles, que mayoritariamente aún permanecían en territorio francés (pocos pudieron emigrar o desearon regresar a España), se les dio la oportunidad de contribuir al esfuerzo de guerra, lo que implicaba alistarse a la Legión Extranjera, a las compañías de marcha o a las compañías de fortificación destinadas a tareas de construcción militar. Fue en estas circunstancias cuando se produjo la invasión alemana y la derrota de 1940, hecho que marcaría el destino de los refugiados españoles durante los años siguientes.
Las redes de evasión: El «Reseau Pat O’Leary» (también conocido como Grupo Ponzán)
Las redes de evasión usadas por miles de refugiados que huían de la barbarie que engulló Europa y por los soldados aliados en territorio enemigo para huir del ejército alemán tienen su origen en el trabajo llevado a cabo por las organizaciones republicanas españolas a ambos lados de los Pirineos, a las que más tarde se unirían los nacientes grupos de la Resistencia Francesa.
Una de las redes más importantes fue iniciada por Francisco Ponzán Vidal, antiguo maestro nacional de orientación anarquista y oficial del servicio de Información de la 24ª División durante la Guerra Civil. Tras llegar a Francia y pasar por el campo disciplinario de Vernet d’Ariege contactó con sus correligionarios del Alto Aragón y La Rioja para crear una red que conectara ambos lados de los Pirineos.Cuando dicha red estuvo lista Ponzán entró en contacto con agentes de los servicios secretos británicos presentes en Francia que, antes de que se produjera la ocupación y tuvieran que pasar a la clandestinidad, le proporcionaron fondos y un par de equipos emisores de radio. En marzo de 1941 Ponzán acuerda con Louis Noveau (agente francés) y el capitán inglés Ian Garrow (evadido recientemente del campo de prisioneros de Saint-Hippolyte-du-Fort), que la red también se encargue de pasar a España a los aviadores aliados derribados para que luego pudieran alcanzar Inglaterra.
Al mismo tiempo que la red se ramificaba también aumentaban las dificultades a las que se enfrentaban, tanto por la acción de las fuerzas alemanas empeñadas en destruir las organizaciones clandestinas en territorio ocupado como por la indiscreción o delación por parte de algunos de los pilotos rescatados. Todo esto condujo a la detención de una parte importante de sus operativos, como fue el caso de Garrow, detenido en junio de 1941 y la del doctor belga Albert Guérisse, enviado para sustituirle y detenido a los pocos días de su llegada a Francia; ambos apresados por la policía de Vichy y encarcelados en Marsella. Guérisse se las pudo arreglar para ser puesto en libertad, la identidad falsa que usaba («Tte. Comandante Pat O’Leary»), dio el nombre con el que fue conocida la red a partir de entonces por los Aliados.
En 1942 el «Reseau Pat O’Leary» centró su actividad en el Hotel de París de Toulouse, por donde pasaban la mayor parte de las expediciones de la red antes de dirigirse a España. Ante la acumulación de llegadas los guías no podían dar abasto, lo que aconsejó incrementar las salidas por mar, que estaban siendo organizadas por Manel Huet Piera y Segunda Montero y en las que se embarcó a fugitivos en barcos mercantes españoles que partían de Sète hacia Barcelona y Valencia (los capitanes de los barcos y los aduaneros franceses fueron sobornados, aunque en el caso de los aduaneros también lo hacían para fastidiar a sus homólogos alemanes).
Mapa de la Red Ponzán (realizado a partir de este mapa)
En 1943 las actividades de la red de evasión «Pat O’Leary» estuvieron de nuevo en el punto de mira de la Gestapo (Ponzán había ayudado a huir a Garrow del campo de Mauzac en Dordogne a principios de enero de ese mismo año). Los alemanes recurrieron al soborno para intentar desmantelar la organización, cosa que consiguieron en parte cuando uno de sus miembros, el francés Roger Neveau (apodado «El Legionario»), delató al matrimonio Mongelard (propietarios del Hotel de París), al sastre judío Ullman (encargado de confeccionar ropa y disfraces para los fugitivos) y a Louis Noveau (detenido en la Línea de Demarcación que separaba la Francia Ocupada de la Francia de Vichy mientras guiaba a un grupo de aviadores). En marzo de ese mismo año Guérisse también fue capturado de nuevo. Todos fueron deportados a los campos de exterminio, Guérisse fue enviado primero a Dachau para ser trasladado posteriormente a Mauthausen, donde pudo sobrevivir gracias a la ayuda de la organización clandestina internacional del campo (iniciada por los deportados españoles que fueron internados en el periodo 1939-1940).
Ponzán y los hombres que no fueron apresados reconstruyeron la red, aunque lo más aconsejable para Ponzán hubiera sido abandonar la zona inmediatamente. No lo hizo ya que deseaba organizar la evasión de su hermana Pilar (detenida en las redadas anteriores e internada en el campo de Brens), eso hizo que se acabara su suerte ya que fue detenido por un policía francés al reconocerlo por la calle. Tras su detención fue condenado a 6 meses de prisión por estar indocumentado (se había comido su tarjeta de identidad falsa mientras estaba en el calabozo a la espera de ser interrogado).
Después de estos 6 meses y cuando estaba a punto de ser puesto en libertad la Gestapo (que sospechaba de su verdadera identidad) y parte del aparato judicial de Vichy afín a los alemanes consiguieron que fuera condenado a 8 meses de prisión por «actividades antinacionales» y trasladado el 6 de junio de 1944 a los calabozos de Saint-Michael, reservados a los detenidos de la Gestapo (y donde seguramente fue torturado).
Placa en el cementerio de Buzet
A nuestro hermano Francisco Ponzán.
Exiliado político español.
Gran resistente.
Muerto por Francia el 17/8/44 a la edad de 33 años.
A nuestro hermano Francisco Ponzán.
Exiliado político español.
Gran resistente.
Muerto por Francia el 17/8/44 a la edad de 33 años.
El 17 de agosto, mientras ya se combatía en las calles de Toulouse para liberar la ciudad, Francisco Ponzán y otros 50 presos fueron sacados de sus celdas y conducidos al bosque de Buzet-sur-Tarn (a unos 30 km. al NE de Toulouse) donde fueron ejecutados y sus cuerpos quemados en tres hogueras (hoy en día aún se desconoce si fueron quemados vivos).
Como reconocimiento póstumo a los servicios prestados Francisco Ponzán Vidal fue distinguido con los siguientes honores:
- Emblema de la Hoja de Laurel de su Majestad (una distinción británica que raramente se concede a extranjeros)
- La Medalla de la Libertad (concedida por el gobierno de los Estados Unidos)
- La Medalla de la Resistencia y la Cruz de Guerra con palmas así como el grado de capitán del Ejército Francés y agente de misión de tercera clase
Los guerrilleros españoles en las fuerzas de la Resistencia
Tras la derrota de Francia en 1940 las compañías de marcha y fortificación fueron reconvertidas en agrupaciones de tipo disciplinario conocidas como Groupes de Travailleurs Étrangers (Grupos de Trabajadores Extranjeros, GTE), que actuarían principalmente en la Francia no ocupada (el Vichy de Pétain). En dichos grupos se integrarían los españoles y los miembros de una veintena de otras nacionalidades que, junto con los ciudadanos franceses, formarían el núcleo de la Resistencia.
Las primeras acciones de las que se tiene noticia se llevaron a cabo en el invierno de 1941: el GTE 643 voló parcialmente el puente ferroviario de Saint-Brice-sur-Vienne (Haute Vienne) y los GTE 514, 515 y 517 (región alpina de Haute-Savoie) llevaron a cabo tareas de propaganda repartiendo octavillas subversivas y realizando tareas de ayuda a los perseguidos por los nazis, proporcionándoles cobijo y documentación falsa.
Estos primeros actos de resistencia marcaron el terreno por el que se desplegarían los guerrilleros españoles: la región de los Alpes, la región Centro y las costas de Bretaña y Normandía (lo que también implicó la participación de mano de obra española en la construcción del Muro del Atlántico, construcción defensiva llevada a cabo por la Organización Todt para evitar futuros desembarcos aliados en el continente europeo, y que sería objetivo de varios actos de sabotaje de diversa índole) y tendrían Toulouse como centro de operaciones y dirección.
Los españoles también actuaron en París, como fue el caso del catalán José Roig, ejecutado en julio de 1941 tras ser acusado de efectuar tareas de reclutamiento para De Gaulle (de hecho fue uno de los primeros resistentes ejecutados en la capital) y Celestino Alfonso, parte del Destacamento Especial dirigido por el poeta armenio Missak Manouchian, los miembros del cual fueron apresados y fusilados el 21 de febrero de 1944 (la rumana Olga Bancic, la única mujer del grupo, sería decapitada el 10 de mayo de 1944 en Stuttgart). Tras el fusilamiento de los 22 hombres del grupo se publicó el famoso «affiche rouge» (cartel rojo) con el que los ocupantes pretendían criminalizar al grupo pero que se acabó convirtiendo en una reivindicación del mismo.
En el mes diciembre de 1943 el Consejo Nacional de la Resistencia crea las Forces Françaises de l’Interiéur (Fuerzas Francesas del Interior, FFI), mandadas por el general Koenig, y que agrupan a los distintos grupos que están combatiendo al ocupante nazi: las francesas Franc-Tireurs et Partisans Français (Franco-Tiradores y Partisanos Franceses, FTPF), Armée Secrete (Ejército Secreto, AS) , Organisatión de Resistánce de l’Armée (Organización de Resistencia del Ejército, ORA) y los Franc-Tireurs et Partisans de la Main d’Oeuvre Immigrée (Franco-Tiradores y Partisanos de la Mano de Obra Inmigrada, FTP-MOI) que agrupa al resto de nacionalidades.
Los guerrilleros españoles se avinieron en principio a esta nueva organización, pero en mayo de 1944 se produce el nacimiento de la Agrupación de Guerrilleros Españoles (AGE), que funcionará como una fuerza autónoma respecto a las FTP-MOI durante los combates de la Liberación y que les permitirá obtener armas de los dirigentes de la Resistencia y aspirar a liberar España en un futuro.
En los días previos al Desembarco de Normandía (6 de junio de 1944) los efectivos de la guerrilla española rondan los 12.000 hombres, con otros 1000 repartidos entre los grupos de otras nacionalidades y cerca de 24.000 en tareas de ayuda, como por ejemplo enlaces y correos, en las que no se iba armado.
Una de las acciones más significativas en las que participaron los guerrilleros españoles (concretamente la 3º División de la AGE) en los combates de la Campaña de Normandía fueron los combates de «La Madeleine» del 22 y 23 de julio de 1944, en los que se emboscó una columna alemana de 1.500 soldados y varios vehículos en la carretera de Saint-Hyppolite-du-Fort a Anduze (a unos 40 km al NO de Nimes) con la ayuda de maquis de de los FTPF que conocían la zona.
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