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| The Minotaur por George Frederic Watts |
Como siempre recordaros que es probable que encontréis spoilers, por lo que si estáis jugando esta campaña o vais a hacerlo es probable que no queráis leer más allá de este punto (o sí, vete a saber).
Tras un periodo de tiempo un poco más largo de lo que me habría gustado retomo las crónicas de esta campaña. Si os acordáis, en la sesión anterior nuestros héroes se encontraban ante las enormes puertas decoradas con dragones que conducen al refugio de los sacerdotes de Penumbra excavado en la ladera de un volcán. Tras derrotar a la guardia de orcos, al sacerdote oscuro que los dirigía y tener controlado al elfo oscuro (gracias a ciertas capacidades de Luna, la semielfa...) que atacó a traición y mató a Heldehammer, el PJ asesino de David.
Así pues los personajes ya están dispuestos a entrar en la fortaleza y cumplir con la misión que el dios marino Eru les había encomendado al enviarles hacia esta ignota isla: recuperar el tridente regalo de su padre que los sacerdotes de Penumbra le habían robado.
Los personajes confían en poder seguir controlando al elfo oscuro gracias a las misteriosas capacidades de Luna y así poder evitar que los guardias que posiblemente se encuentren más adelante les ataquen, pero... Una vez traspasado el portal el elfo oscuro consigue recuperarse (indicio de una tirada de salvación exitosa) y da aviso a unos orcos que se encuentran en el cuerpo de guardia que inmediatamente les atacan mientras el elfo se refugia en una cámara lateral.
En la lucha que sigue los personajes son capaces de liberarse con facilidad de los guardias y cuando se disponen a registrar la cámara lateral por donde huyo el elfo oscuro este les ataca con un hechizo de proyectil mágico algo desviado, a lo que ellos responden lanzando una bomba al interior de la cámara (si, en sesiones anteriores construyeron bombas usando los restos de pólvora de las armas de abordo del Sombra Rauda), con lo que lograron eliminar al elfo oscuro.
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| Barbarian por Frank Kovalchek |
Tras este incidente los personajes se percataron que una misteriosa figura les estaba observando desde el portal, un bárbaro acompañado de un mono que les dijo que no se preocuparan, ya que sabía que su misión estaba guiada por los dioses y que intuía que su misión también era la suya... (si, evidentemente es la forma de introducir al nuevo personaje de David).
Tras estas presentaciones el grupo de personajes se sigue internando hacia el interior de la montaña y acaban descubriendo una enorme reja metálica que a modo del rastrillo de un castillo les impide el paso hacia el puente de piedra que se ve más allá. Con un poco de esfuerzo y colaboración entre todos lograron mantener subida el tiempo suficiente para que el grupo pudiera pasar y siga caminando por el puente, viendo como debajo del mismo hay una sima en la que bulle el magma del interior del volcán.
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| Minotauro vectorizado original de bapabst |
A medida que se acercan al otro extremo del puente descubren que hay unos goblins que al parecer se están divirtiendo atormentando a un minotauro, cosa que a la bestia no parece gustarle mucho. Los personajes deciden atacar a los goblins consiguiendo derribar a dos de ellos y el resto huye, momento que el minotauro aprovecha para soltarse y... (tirada de dados...) se pone a perseguir a los personajes, que huyen despavoridos por el puente hacia el rejado por el que habían pasado antes mientras asaetean a la bestia. Viendo que no podrán levantar el rejado a tiempo para pasar deciden lanzarle un frasco de aceite que empapa a la bestia y logran que esta arda, aunque el minotauro a la carrera casi choca con Keilor, que se salva por los pelos de ser quemado subiéndose a la reja.
Tras esta emocionante lucha los personajes intentan recuperar el aliento y consideran las opciones que tienen ante sí, ya que se encuentran en una encrucijada, teniendo frente a ello otro rejado que les impide continuar y un camino a su izquierda y otro a su derecha.
Para tener más información deciden usar sus mascotas, por lo que el místico Meler decide enviar a su rata Tachi a investigar más allá de la reja y la samurái Kai a su águila Washi para que investigue el túnel de la izquierda. Al volver la rata describe como ha visto a "gente pequeña" trabajando esclavizada y al volver el águila describe unos cercados en los que están encerrados unos peligrosos huargos, si a esto le añadimos que desde el túnel de derecha se oyen los ruidos propios de una enconada batalla no parece que la situación sea muy halagüeña...
¿Qué pasará en la próxima sesión?
Como se suele decir:
Continuará...
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Yo, la aventurera semielfa llamada Luna y mis compañeros nos disponemos a cruzar la gran puerta. Cabe mencionar que a todos se nos ha pasado por la cabeza dar la vuelta pero ha sido muy largo el camino y ahora hemos de seguir adelante. Yo tenía "embrujado" al elfo oscuro y con él podríamos adentrarnos sin problemas. Pero logró zafarse de mi "embrujo" (va a ser que el corsé mágico está perdiendo eficacia). Además se nos apareció un bárbaro que despues de una sútil rueda de preguntas (con daga en el cuello) parece que es de fiar. Al menos sus musculosos brazos (que contrastan con su diminuto cerebro) tienen una fuerza muy por encima del resto. Y ahora tenemos un nuevo compañero y los restos quemados de un minotauro aceitoso que emana un olor potente que pronto atreaerá a más bestias.
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